Pepe
Pepe, un defensor central, era conocido por su agresividad y determinación en la defensa. A menudo entraba en duelos físicos con los delanteros rivales y no tenía miedo de poner su cuerpo en el camino de los disparos. Fue muy caracterizado por sus grandes entradas duras a rivales, y también lo recordamos mucho pegando patadas a rivales en el suelo. Absolutamente todos lo recordamos en aquella icónica jugada pateando a un rival en el piso.
Paolo Montero
Si vamos hablar de carniceros, este central uruguayo tenía que estar si o si. Fue expulsado en 21 oportunidades. Muy conocido por su estancia en la Juventus, Montero fue él jugador con él mayor récord de tarjetas rojas en la Serie A.
Van Bommel
Él jugador más sucio del Mundial 2010, el ogro holandés. Sin dudas Van Bommel sabía como jugar sucio y lo hacía muy bien porque en cuestión de medio segundo el holandés ya se salía con la suya. Van Bommel siempre se las ingenió para que los árbitros hicieran la vista gorda.
Nigel de Jong
Muy recordado por la increíble patada voladora que le pega a Xavi Alonso en la final del Mundial 2010. Nigel tuvo muchas así y siempre se le destacó por su juego agresivo en el medio del campo.
Sergio Ramos
Él eterno capitán del Real Madrid. Sergio Ramos fue uno de los mejores centrales en la historia del fútbol, pero también cabe destacar lo sucio que era en el campo. Fue expulsado 26 veces en su carrera.
Felipe Melo
Fue apenas expulsado 20 veces, digamos apenas porque lo que pegaba el brasilero no tenía nombre. Los rivales le tenían y le siguen teniendo miedo. Se marchó del Palmeiras y actualmente se encuentra en él Fluminense repartiendo 'leñasos'.
Óscar Ruggeri
Este histórico defensor argentino, campeón del Mundo en el 86, fue otro futbolista que su mayor virtud era el juego sucio. A pesar de eso solo obtuvo 12 tarjetas rojas en su carrera, un número que le quedó bastante corto para lo que se reflejaba en el campo.